Los brackets de baja fricción son un tratamiento de ortodoncia muy innovador que prescinde de arcos y ligaduras para que el movimiento dental sea más natural.
Esta nueva ortodoncia, de la que existen distintos tipos, es realmente cómoda para el paciente, ya que sufre menos molestias y se necesita menos tiempo de tratamiento.
Con una ortodoncia de brackets de baja fricción se puede reducir considerablemente el tiempo de tratamiento respecto a la ortodoncia tradicional. Así, harán falta seis meses menos para obtener los mismos resultados.
La demanda de brackets de baja fricción ha aumentado considerablemente entre los pacientes porque son muchas las ventajas que este tipo de tratamientos odontológicos ofrecen. Pagar un poco más merece la pena.
Entre los diferentes tratamientos de ortodoncia que existen, uno de los más innovadores son los brackets de baja fricción o autoligado. Se trata de un mecanismo que no necesita ni gomas ni ligaduras para agarrar el arco de la ortodoncia, lo cual evita muchas molestias al paciente.
Este novedoso sistema de agarre hace que la fricción entre el bracket y el arco del aparato sea menor, por lo que resulta más cómodo para el paciente. Pero, además, permite mover los dientes con mayor facilidad, lo que reduce el tiempo en el que el paciente debe llevar el aparato. Por tanto, mejora a la ortodoncia tradicional.
Podemos encontrar, a grandes rasgos, dos tipos de ortodoncia de baja fricción:
La ausencia de ligaduras y arcos es la diferencia principal entre los brackets de baja fricción y los convencionales. Obviamente, también tienen los brackets de baja fricción un precio algo más elevado, puesto que su sistema es más innovador y eficaz.
Los brackets de baja fricción ofrecen numerosos beneficios para el paciente:
Hay menos visitas al dentista. No es necesario realizar tantas correcciones porque no hay arcos que adaptar ni ligaduras. Por eso, hay que acudir al dentista con menos frecuencia y, cuando se producen estas visitas, suelen ser más cortas que con un tratamiento de ortodoncia convencional.
El antes y el después de un tratamiento con brackets de baja fricción es realmente notable. Los resultados se ven en menos tiempo y con la misma eficacia que con la ortodoncia tradicional. Además, sufriendo bastantes menos molestias, por lo que ya es uno de los tratamientos dentales más demandados.
En Clínica Dental Míriam Cantero puedes resolver todas tus dudas sobre la ortodoncia de baja fricción. Si te interesan unos brackets de baja fricción en Churriana de la Vega, sólo tienes que ponerte en contacto con nosotros y pedir una cita. Estaremos encantados de proporcionarte toda la información que necesitas para decidir tu tratamiento.
Como decimos, un tratamiento de brackets de baja fricción es más rápido que una ortodoncia tradicional. Por lo general, se puede concluir el tratamiento en seis meses menos que con los brackets convencionales. ¡E incluso más! Aunque, claro está, todo dependerá de cada paciente y del tipo de problema bucodental que se intente corregir.
La principal desventaja de los brackets de baja fricción respecto a los brackets tradicionales es el precio, ya que al tratarse de un tratamiento tan innovador suele ser más caro que la ortodoncia convencional. Pero, vistos los resultados, la reducción de tiempos del tratamiento y la comodidad que supone para el paciente, seguro que merece la pena.
Efectivamente, entre los distintos tipos de brackets de baja fricción que hay en el mercado, puedes encontrar brackets metálicos de baja fricción y también brackets transparentes. Estos últimos son más discretos e igual de efectivos.
En Clínica Dental Miriam Cantero ofrecemos todo tipo de tratamientos personalizados, estos son los más destacados en nuestra consulta y por los que los clientes terminan recomendándonos. Si necesitas más información accede a cada uno de ellos.
una rama muy importante dentro de la odontología porque unifica objetivos de mejora física con salud bucodental.
El objetivo de la odontología general es evitar problemas de salud bucodental futuros, adelantándose para que no sean más complejos con el paso del tiempo.
Una solución estética y funcional para sustituir piezas dentales perdidas de forma segura y duradera en el tiempo.
uno de los tratamientos dentales más conocidos y sirve para alinear los dientes, mejorando la mordida, la masticación y la estética del paciente.